Bunkers & Fairways

bunkers fairways

Si un jugador trata de corregir sus fallas por sí mismo sin conocer las verdaderas causas, y para ello hace sucesivos cambios hasta que acierta con algo que le permita obtener los resultados que desea, simplemente estará manoteando en la oscuridad. Estos métodos casi nunca dan resultados, salvo en contados casos. Si se practican procedimientos erróneos será imposible alcanzar una real evolución en el juego.

Cuando un golfer se dispone a mejorar su juego, debe comenzar por un entendimiento y acatamiento total de los movimientos fundamentales del swing de golf. Así podrá convertir su juego en algo agradable.

Over Swing

La diferencia entre una madera y un hierro está en el giro del cuerpo en el backswing. Con los hierros hay que tener cuidado de no sobrepasar la línea horizontal en el top del swing, controlar el movimiento vertical del brazo derecho y mantener la pierna derecha bien afirmada al completar el swing, para evitar que el cuerpo gire demasiado y provoque la pérdida del control del palo.

El over swing nunca se da por un exceso en el quiebre de las muñecas sino por doblar el brazo izquierdo o dejar caer el palo en el top del swing, con lo que las manos pierden el control de la cabeza del palo.

Desde el bunker

El golpe de la pelota desde el bunker varía de acuerdo a la posición, al lie de la pelota y a la distancia hacia la bandera. Si la pelota se encuentra "colocada" sobre la arena, hay que calcular la distancia que la separa del borde del bunker, y luego golpear primero a la pelota y después la arena, como si jugara un pitch desde el pasto.

Si, como la mayoría de las veces, la pelota está semihundida en la arena, hay que jugar con el sand; al tomar el stance hay que afirmarse bien en la arena, ya que ofrece un apoyo poco seguro, y abrir la cara del palo para evitar elevar rápidamente la pelota; el swing será bastante recto y el peso del cuerpo ligeramente afirmado sobre el costado derecho. El grip debe estar firmemente tomado, para que el palo no gire entre los dedos al tomar contacto con la arena.

El golpe de la pelota depende de la altura del borde del bunker y la distancia entre la pelota y la bandera. Si el palo se clava en la arena, la pelota tendrá un vuelo limitado y muchas veces no saldrá del bunker.

Si la pelota está cerca del borde, hay que abrir la cara del palo apuntando al cielo y separando mucho los pies; al golpear la pelota se debe tomar muy poca arena, para que el palo se desliza para pasar por debajo de la pelota, el palo se baja de afuera hacia adentro.

Cuando la pelota queda hundida en la arena, hay que cerrar la cara del palo; el peso del cuerpo se apoya sobre el costado izquierdo, aplicando un golpe descendente entre la pelota y la arena para elevarla rápidamente. Se debe pegar con decisión, pero evitar la pronación de las manos.

Backspin

Todo tiro de madera desde el tee que alcance la pelota en sentido descendente, hará que ésta se eleve en el aire rápidamente. El golpe hacia abajo produce el backspin y ese efecto fuerza la pelota hacia arriba, hasta que pierde el impulso y cae al suelo casi verticalmente.

Así es como muchas veces el jugador que ha tenido una suave sensación en la pegada y que ve salir la pelota en magnífico vuelo, se sorprende después al encontrar su pelota varias yardas detrás del otro jugador que parecía no haber pegado tan bien como él.

La incomprensión de este principio hace que el jugador que tiene poco conocimiento del movimiento que produce el buen golf se encuentre tan perdido cuando juega en días ventosos.

Dudo que haya algún golfer que se enfrente a un tiro con la deliberada idea de golpear la pelota en sentido ascendente. Pero si en ciertas circunstancias se le ocurre que tiene que hacer algo para elevar la pelota, el impulso de obtener ese resultado se sobrepone al razonamiento lógico.

Exceptuando un golpe desde el tee o con las maderas desde el fairway, cuando se desea obtener mayor distancia con los hierros, cada tiro debe ser ejecutado en el arco descendente.

Misión del instructor

La más importante misión del instructor de golf es llevar al alumno a la correcta posición en lo alto del backswing, desde la cual el alumno se encuentra en disposición de golpear la pelota.

Los métodos que emplea un instructor pueden ser distintos a los que emplea otro instructor, pero hay que tener en cuenta las diferencias entre los distintos alumnos; todos los profesionales que conocen bien su trabajo deben tratar de lograr en cada discípulo la posición que le corresponde en particular a cada uno, aún cuando haya que hacerlo por diferentes métodos.

En todas las profesiones algunos hombres superan a otros en el mismo trabajo, y lo mismo pasa en el golf; unos se especializan para jugar, otros en estudiar el swing de golf con el solo propósito de sentirse capacitados para enseñar a otras personas. Con esto quiero decir que los mejores jugadores no siempre son los mejores instructores. Lo mismo que un experto mecánico no es necesariamente un notable piloto. La teoría no es necesaria, pero sin experiencia práctica, resulta inútil.